Mensajes que recibimos y transmitimos

     Como afirman Gema Torres y Mª del Carmen Arjona en "Educación Infantil y Coeducación", desde bebés se nos diferencia en función del género y, de esta manera, el trato que recibimos es distinto. A los niños se les elogia por su valor o su fuerza y a las niñas por su belleza o su dulzura. Es un estereotipo tan marcado que se hace invisible a nuestros ojos en la vida cotidiana.

Podríamos hacer referencia a otras muchas actitudes que perpetúan los estereotipos de género en niños como preguntarles acerca de novios o novias suponiendo su heterosexualidad, el refuerzo de la expresión de sentimientos en niñas y la represión de ellos en niños (llorar es de niñas), el refuerzo también de la agresividad en niños (defiéndete como un hombre)...

Fallamos desde un primer momento en adoptar una forma específica de referirnos a alguien dependiendo de su sexo. Estas criaturas están creando sus esquemas mentales acerca de todo lo que les rodea y estos estereotipos hacen que se sientan presos de comportarse y sentirse de cierta forma, además, que comprendan que es la realidad y no existe otra alternativa.

Como todos los temas de discriminación tocados en el curso, deberían ser tratados con ayuda de la educación en valores de igualdad.